VENENO PARA SALVAR VIDAS

En los últimos diez años se han registrado más de dos mil personas mordidas por serpientes venenosas,indican datos arrojados por la Caja de Seguro Social y el Ministerio de Salud.De esos casos, una serpiente en particular es la mayor responsable, la denominada víbora X.

Al ser la más letal y la que mayor casos de mordeduras presenta, secrea el proyecto de Ofidismo, el cual plantea obtener el "Veneno Patròn" de la víbora X; además de fundar un Banco con Veneno, informó el director del Centro para la Investigación para Respuestas en Ofidios (CEREO), de la Facultad de Ciencias Naturales y Exactas de la Universidad de Panamá, Víctor Cortés Martínez.

Martínez explicó que la razón de crear un banco con veneno, es confrontar nuestro Veneno Patrón con los sueros producidos en otros países de la región, como Costa Rica, Colombia, Méjico y Bolivia; así conocer cual es el más efectivo para Panamá.


El biólogo añadió que Panamá utiliza el suero producido por Costa Rica, y que en aras de prevenir un desabastecimiento se hace el estudio, a fin de encontrar otra opción para suplir las necesidades de suero antiofídico en el País.

Al respecto de la serpiente X, el director del CERO, indicó que es posible encontrar a la especie en todas las áreas geográficas de Panamá y que se han ubicado "terciopelo"(como también se le conoce), hasta en los mil trescientos metros sobre el nivel del mar.

El profesor dijo que todos los proyectos del ser humano que hafectan el hábitat, ya sean actividades agrícolas o mineras, inciden en el desplazamiento de las serpientes, lo que ocasiona más ataques.

De igual manera recalcó que las plantaciones de granos, atraen a animales pequeños como roedores y aves, quienes constituyen la principal fuente de alimento de los ofidios.

Como parte del proyecto se hace docencia en las comunidades y se le explica a los campesinos, como sus actividades influyen en el estilo de vida de las serpientes y como convivir con ella. Incluso se les enseña que no todas las erpientes son peligrosas y a identificar aquellas que se alimentan de las que no son venenosas.

Cortés concluyó que el Banco con Veneno ayuda a otros profesionales de la ciencia en sus investigaciones, cuyo denominador común son las víboras y su veneno, lo que acarrea investigaciones científicas de gran valor para la sociedad.