MALA NUEVA

Caminaba con la cabeza gacha,a la espera de la tan anhelada solución de sus problemas. - ¡¿No puede se cierto que me encuentre en está situación?!
Los últimos días no habían sido los mejores. Perder el trabajo no fue lo más oportuno.
La luz del sol lo encandilaba. Traía los ojos tan cerrados que casi no podía ver el camino.- Pisar, no pisar, pisar, no pisar...
¿Qué le diría a su madre? Aun no encontraba la manera correcta de dar la mala nueva a su progenitora. Su familia dependía de ese salario. Era la fuente de la cual emanaba el dinero que financiaba los estudios de sus hermanitos.
- A la vieja no le hará gracia. Ya trabaja muy duro. ¡"On", esa no e´ de ahí! Tengo que resolve´e cómo sea.
Los frecuentes saludos de los amigos y vecinos de la calle, no le levantaban el ánimo.
Ahí estaba, su pequeña casa de bloque sin repellar, lo esperaba con un farol de luz blanca encendida.
Caminó por el senderito hecho de cemento hasta la puerta de la casa. Inspiro profundo, movió la cabeza a ambos lados, sacó la llave, la colocó en el cerrojo, la giró y entró...